“Mi aspiración es muy sencilla: poder terminar mi mandato dejando una Argentina donde la gente ya no piense en la inflación. Ese es mi pequeño gran sueño”. Así lo señaló el presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Federico Sturzenegger, durante la conferencia de apertura de la Reunión Anual de la Asociación Argentina de Economía Política que se inauguró ayer en el anfiteatro de la la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UNT.
El funcionario, que compartió la mesa panel con su par de Uruguay, Mario Bergara, aseguró que lograr dominar la inflación es lo más conducente para que nuestro país vuelva a crecer de manera sostenida. “Como sabemos, la inflación es un impuesto que tiene una incidencia distributiva muy negativa. Un trabajo que hizo la Fundación Mediterránea hace unos años con guarismos parecidos a los que tenemos ahora, reveló que la inflación le come aproximadamente el 20% del sueldo a una persona de salarios más bajos, mientras que esa misma inflación apenas araña el 2% en los sueldos más altos. Por eso, la lucha contra la inflación no puede esperar”, señaló.
La tasa de interés
Sturzenegger llegó a Tucumán por la tarde, luego de participar en Buenos Aires de una reunión de la Comisión de Acuerdos del Senado, donde defendió su pliego para ser oficializado al frente de la entidad monetaria y dijo que el esquema que aplica el BCRA “funcionó” en otros países como Israel, que de tener una inflación del 400% a principios de los ‘80 se redujo a casi cero en una década. Este ejemplo también fue mencionado en detalle durante su charla en Tucumán.
En este sentido, el funcionario atribuyó la trayectoria tan declinante de inflación, al manejo de la tasa de interés, para combatirla y ratificó que la baja del índice de precios es lo más adecuado para lograr la recuperación de la economía. “Hemos bajado la inflación”, insistió ante los senadores y pronosticó: “el desempeño económico va a ser mejor el año que viene hacia el segundo semestre”.
El titular del BCRA puntualizó que la Argentina hace cinco años que no crece aunque luego admitió que hubo crecimiento el año pasado y sostuvo: “la recesión, que empezó en la segunda mitad del año pasado, no es de las recesiones más grandes ni cerca de la que hemos tenido en los últimos años”. En el actual esquema que sigue la entidad monetaria, Sturzenegger marcó: “creemos que la tasa de interés se va a tener que mantener positiva pero en un rango más razonable”.
La autoridad monetaria recordó también que cuando en abril brindó un primer informe en el Senado la tasa de interés estaba en el 38% y dijo que no la iba a tocar hasta la inflación bajara, por lo que resaltó que como en los últimos tres meses ha sido del 1,2 mensual promedio, ahora la tasa de interés está en el 25,75%.
En Tucumán, el jefe del Central señaló asimismo que se ha decidido bajar la inflación de una manera más compleja al principio. “Si no hubiéramos ido por la fácil, que es atarnos al tipo de cambio, como ya se hizo en otras oportunidades anteriores”. Por eso, resaltó que utilizar la tasa de interés como instrumento para bajar la inflación es una forma novedosa en la Argentina pero no en el mundo, que acá, además, se hace con un tipo de cambio flotante.
Finalmente, dijo que los otros dos ejes de la política del Central, son el desarrollo de sector financiero y la eliminación del efectivo para ir a un sistema de funcionamiento de economía basado en pagos electrónicos. “Kenia y Suecia son puntos extremos que han avanzado en este tipo de agenda”, acotó. Y explicó: “hay toda una agenda que por supuesto va a ser complementada con la reducción de costos del sector financiero, el cual ha sido uno de los grandes beneficiarios de la inflación y cuyo desafío, en los próximos años, será vivir sin inflación”.